El tiempo entre líneas: Reseña: La Espada de Cristal: Arrodillarse o sangrar

¡Buenas!

El otro día terminé La Espada de Cristal y hoy por fin puedo hacer la reseña, ahí va.

La sangre de Mare Barrow es roja (el color de la gente común), pero sus habilidades son plateadas. La corona dice que es un milagro, una imposibilidad. Sin embargo, Mare sabe que hay otros como ella, Rojos con capacidades similares a las de los Plateados, y comienza a buscarlos y reclutarlos para unirse en la lucha contra el príncipe que la traicionó. Poco a poco, Mare se encontrará en una encrucijada mortal en la cual corre el riesgo de convertirse exactamente en la clase de monstruo que quiere vencer. ¿Claudicará ante el peso de la muerte que implica la rebelión, o las continuas traiciones habrán endurecido su corazón para siempre?
«Si soy una espada, soy una espada hecha de cristal, y siento que he comenzado a romperme.»

A decir verdad, esperaba más. Me explico, la autora, en esta entrega, se detiene a describir cosas que realmente son prescindibles en la historia, por ejemplo, cosas que entretienen al lector de la trama principal. En general, el libro es genial, pero el principio es muy lento y todo lo bueno se concentra al final, eso hace que el lector deje de tener ganas de leer o incluso que lo deje a medias. Aún así, no ha sido mi caso. Creo que Victoria ha conseguido desarrollar bien la historia que envuelve a Mare, Cal y los demás en esta segunda parte de la saga. De todas formas y aunque se me ha hecho un poco lento, seguiré diciendo que esta saga es de las mejores que he leído.

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